Germán de Silva sigue ganando premios: Actor revelación en Mar del Plata, Mejor actor de reparto en los Premios Sur. Algo funciona mal en el mundo o, reduciendo el margen de fatalismo, en la industria cinematográfica argentina.
El otro día me bajé Wakolda de Lucía Puenzo y me la vi en el celular, arriba del bondi, de parado, camino al trabajo; después de verla me acordé de sus películas anteriores El niño pez y XXY. Perdón Lucía, pero alguien te lo tiene que decir: ¡David Cronenberg no es tu hermano! Concreta y puntualmente, ningún vinculo ancestral, sanguíneo, familiar y/o médico los une. Es duro, pero ya va siendo hora de que lo sepas.
Festival del Cine Alemán, Semana del Cine Europeo, Semana del Cine Francés, Italiano, Israelí, Ruso, Polaco, Judío, Árabe; Festival internacional de Cine Ambiental; Han cine: Festival de Cine Coreano; Primer Festival de Cine de Europa Central y Oriental; Buenos Aires Rojo Sangre, etc., etc., etc… Muchachos: ¿les sobra la guita o están tan al pedo que tienen tiempo de sobra para ver tanta gilada toda junta? Aflojemos un poquito o que alguien ponga orden. Con la cartelera del jueves tenemos de sobra.
Salió Revista de cine. Ya tenemos qué llevar debajo del brazo al próximo BAFICI. Escriben un montón de personas y Filipelli. Trae una discusión re moderna sobre la crítica y un muy bello comentario de Filipelli: “Mientras ustedes hacían películas, Quintín decía que Nueve reinas era una obra maestra”. Me gusta mucho porque entiendo la mayoría de sus artículos, a diferencia de los de Kilómetro 111, que no los entiendo una mierda, y los de Nicolás Prividera, que algunas veces los entiendo y algunas veces no. Igual, con los de Prividera, nunca pase de 6, 7 u 8 oraciones porque me aburro y además escribe oraciones largas. La tapa esta buenísima: trae sólo letras y algunos números (por ejemplo, el 1 aparece 6 veces) y lo mejor: no trae ningún negro zombi que asusta. ¡Una revista FUCdamental!
Salió un libro de Prividera: El país del cine. Si Prividera mismo, si lo abarcativo y regional del título no los espanta, es mi obligación hacerles saber que ¡son 400 páginas! Están advertidos.
También uno de Vieytes: Subjetiva de nadie. Si logramos ignorar tan poco marketinero titulo, toda una invitación a no comprarlo y, si lo compramos, a no leerlo, son sólo 267 ligeras páginas (más todas las giladas que vienen en el fondo de los libros). Eso si, ¡atenti!, parece que se le cayeron varios puemas al pie de página; si no le dan bola a los asteriscos pueden seguir de largo tranquilos.
Me olvidaba, si alguno de ustedes escribió un libro o una revista que acaba de salir, que hable sobre cine y esas cosas, y quiere que Diego Battle la mencione o haga algún comentario en su sitio, se la tienen que mandar, porque si él no la recibe no va a decir nada de nada.
Certezas sobre el festival de Mar del Plata y las películas:
Solicito con fervor que el festival no se haga más en Mar del Plata: Manolo, la Boston, Antares, el comedor del Banco Provincia, Bocinas, el mar, Quique y Tony (los lobos marinos), los cornalitos, las rabas, los jubilados, los outlets de zapatillas, la peatonal San Martín con el ciego cantor y el chileno puteador, y las películas proyectadas dificultan la asistencia y posterior disfrute del mismo.
Comparto y festejo con euforia la premiación de la competencia internacional de este año. Una mancha imperdonable: que no se llevaran premio o una mísera mención las excelentes participaciones del Jabalí en El perro Molina (¡qué bien actúa su propia muerte en cámara!) o el perro herido de Jauja (¡su expresión y la herida misma nos dejan claro que se rasca porque no entiende lo que pasa!).
No tengo mucho más para decir, salvo que las pasadas a las 9 de la mañana de las funciones para acreditados pueden ser una patada en los huevos con borceguíes Ombú. Y no hablo solo del madrugón. Muchachos: ¿nunca una comedia?
Que un proyectorista se va a quedar sin trabajo; se quiso hacer el moderno o el antiguo (no me queda muy claro) y proyectó Jauja y La chambre bleue en un formato del orto.
Que si los críticos que vieron Jauja en la pasada de prensa en Capital Federal la hubieran visto en Mardel al menos la habrían tenido subtitulada y no quedarían como boludos; aunque seguro tampoco la iban a entender y, además, no tenían medialunas para afanarse.
Que, con La vida de alguien, Ezequiel Acuña nos demuestra dos o tres cosas:
- Que extraña los casettes, por eso los incluye en el relato.
- Que descubrió un botón pa’ralentis en la camarita con que la filmó: los metió todos y algunos más. ¡Lástima no muere nadie y que no es un spaghetti western!
- Que Ailín Salas puede hacer de morocha y de misteriosa.
- Que afortunadamente nos habíamos olvidado de Santiago Pedrero.
- Que la puerta del placard quedó entreabierta.
Que si uno ve una erótica de los viernes a la noche en The Film Zone y después una de la Hammer, sería como estar viendo The Duke of Burgundy pero buena, con minas en bolas, sin mariposas, orugas y dominatrices en bicicleta por la campiña.
Que la dimensión de las eufóricas loas de los programadores, y el enunciado de antecedentes festivaleros previos a las proyecciones, deberían servirnos como señales de alerta y ponernos sobre aviso del tamaño de nuestra decepción, malestar y puteadas posteriores.
Que nadie, durante todo el festival, vio sonreír al presidente del jurado internacional: Paul Schrader.
Que hubo una conspiración en los altos mandos, pergeñada por los cinco jurados de la competencia internacional (los populares) para excluir al sexto, Manuel Yáñez Murillo (el divino) de las decisiones importantes a la hora de definir y de esa manera evitar premiar películas que sólo le interesaban a él y a la logia subterránea de críticos rectores de la transcendencia y el embole cinético. Ampliaremos.
Que el guardarropa de Marcelo Alderete no incluye colores claros en su vestimenta.
Rumores cinéfilos
Calavera no chilla: spin off de un personaje de El perro Molina.
Los simuladores: pecados salvajísimos. Se “filtró”, piratería mediante, que el guión ya estaría listo y los actores habrían dado el visto bueno; aparentemente son cuatro relatos cortos, bastante violentos, protagonizados por cada uno de los miembros del grupo por separado: Santos, Lamponne, Medina y Ravenna. Se concentran en cuatro pecados capitales y cómo afectan la vida diaria y la cotidiana toma de decisiones de nuestros héroes. A partir del éxito cosechado por el mexicano “¿No hay un piquito para mí?” se agrega un quinto relato y personaje, pensado como comic relief, que hace de la lujuria su pecado más simpático. Telefé estaría interesado en participar en la producción.
Relatos salvajes: Se rumorea la posibilidad de una remake con producción americana; cada una de las historias estaría dirigida por importantes directores del mundo; se barajan los nombres de Lars von Trier, González Iñárritu, Carlos Reygadas, Gaspar Noé, pero Christopher Nolan (uno de los mas entusiasmados) ya habría dado el OK y estaría trabajando sobre una de las historias con la voluntad de trasladarla al espacio o a la mente del protagonista. Todo está encaminado. Enhorabuena.
La patota: remake de la película del año 1961 dirigida por Daniel Tinayre y protagonizada por Mirtha Legrand, recordada por la escena de la violación. No queda claro aun si el papel en la nueva versión sería interpretado por Dolores Fonzi u Oscar Martínez. Tampoco si incluiría almuerzos.
Las 7 mejores (el canon) y las 5 de mierda (la cloaca) del año:
Las mejores argentinas:
1) El rostro, de Claudia Fontan (es muy lindo).
2) Amapola, de Javier Zanetti.
3) Desho(n)ra, de Bárbara Zaraza Daysi MacQueen.
4) Las insoladas, de Gustavo Ta ta ta retto.
5) El ardor, de Diego “Pancutan” Frenkel.
6) El crítico, de Jay Sherman.
7) Bañeros 4, los rompeolas, de Rodolfo Ledo.
8) Operación Jau ja, del Beto Alonso y Guido Aragorn.
9) Los Dueños, de la Lechuza del Banco Hipotecario.
Las mejores extranjeras:
1) 12 años de esclavitud.
2) Interestelar.
3) Oldboy: días de venganza (Ojo, la buena: la del grone Lee).
4) La viuda de Adela.
6) Noé.
7) Éxodo.
8) El Apocalipsis.
9) Tierra de María.
10) El Apocalipsis.
11) Las puertas del cielo.
12) Calvario.
13) El lobo de New York.
14) Welcome to la Bond Street.
15) La Grande Bajezza, de Paolo Sorettino.
16) NK, “El Documental Definitivo” de Skipper, Kowalski, Rico y Werner Herzog.
17) Domingo Cavalo Dinheiro, de Antonella Costa.
18) El juez, de Fernando Juan Lima.
19) Perro malo, de Samuel Fuhrer.
20) Perdida.
Las peores, sin discriminar:
1) Perdida.
2) Ida y vuelta.
3) El descocido del lago (una llena de culos rotos).
4) Y ahora? Recuérdame (mucho no me acuerdo, me quedé dormido, pero me parece que había un rarito con sidra).
5) Adiós al lenguaje (sin palabras).
6) Dos disparos, del Tirador de Belgrano.
7) 7 Cajas (una filmada en La Salada, llena de indocumentados).
8) Carta a un padre (a ver si nos modernizamos: tienes un e-mail).
9) La ballena va llena (¿Usted no nada nada? No, no traje traje. ¿Se entendió?).
11) Promassa del Norte, de Gloria Carrió y Pino Donaggio (continuación no autorizada de Promesas del este).
Aquí puede leerse la primera parte.
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