*Toda escena tiene su detrás, esa que se esconde a los ojos del observador circunstancial. Pasar del otro lado no le está permitido a cualquiera: implica revelar el truco que permite la ilusión, romper la magia. En Ciclón fantasma (Cardini, 2024) la exploración se sitúa justamente en ese espacio invisible que fluctúa desde un comienzo entre el olvido (¿alguien sabe que lo que vemos está allí, que funciona?) y el abandono (¿o es que las máquinas se mueven solas, sin necesidad de intervención humana?). La rueda que traslada la aerosilla gira vacía por la torre terminal, como si estuviera poseída por un fantasma que la hace funcionar. Más que al terror invoca al misterio de su funcionamiento. Después aparecen dos hombres que trabajan en el interior de un espacio que no podemos definir con claridad. Su trabajo es construir una escena y lo que vemos no es nunca ese espacio sino lo que se ve desde atrás: paneles que son atornillados, paredes pintadas a mano, escaleras y luces, un decorado vacío a un lado y otro. Fabián reconstruye lo que conocimos como Tren Fantasma quienes fuimos habitués del Italpark, y que ahora se llama Ciclón Fantasma. Marca, sin embargo, la diferencia: que esa casa del terror no es como las norteamericanas porque lo que interesa es la sorpresa. Algo de lo que el documental se hace cargo, desentendiéndose de lo obvio y poniendo a la escena en fura de campo (cuando escuchamos los gritos de los visitantes) para construir su propia escena sostenida en lo que está detrás: un par de jóvenes maquillándose, preparándose, entrando y saliendo por las aberturas del decorado, asumiendo la representación como forma.

*Alejandro, en cambio, construye un museo particular (tanto en el sentido de personal como alejado de lo ordinario). Tiene un sueño que es construir Tierra de Gigantes, donde exhibir todo lo que tiene: un espacio que sueña dominado por un gran reloj que vaya hacia atrás en el tiempo. Del museo vemos apenas alguna vitrina, con objetos que fuera de contexto, carecen de significado para el espectador. Del proyecto hay apenas palabras, una escena construida en el relato. Sin embargo, como ocurre con Fabián, Ciclón fantasma acerca al personaje desde detrás de esas construcciones no visibles (y no es casual que ese tramo comience con la mujer que lee las manos de Rosa, la pareja de Alejandro, haciendo visible lo invisible en las líneas de la mano). El taller en el que los objetos acumulados por Alejandro son desmontados (incluso a los martillazos como ocurre con el parlante) o limpiados de su suciedad y sedimentos, sin que después veamos para qué se usan. Pero, sobre todo, Alejandro pesca. No peces, sino objetos metálicos con un imán que sumerge en el río atado a una soga: tornillos usados en los puentes, bisagras oxidadas, salen de su escondite líquido para aterrizar en las mesas del taller. Como Fabián con los animatronics de dinosaurios, Alejandro recupera para la vida esos objetos perdidos o descartados. Como Fabián al principio, para Alejandro es el río el que trae lo que se necesita.

*El río es un tercer protagonista, discreto, de Ciclón fantasma. Desde el comienzo, cuando lo primero que vemos es un barco de paseo abandonado y cuando Fabián desciende por el borde para buscar aquello que le pueda servir. El río parece quieto, dócil, está allí como parte lateral de ese espacio que parece neutro, olvidado. Ciclón fantasma no se apoya en la referencia directa en el inicio, aunque se la pueda sospechar. Pasan varios minutos para que desde la aerosilla vacía se descubra la imagen trasera de la Basílica de Luján. El río, entonces, desde ese lugar ya no se configura como el que trae lo necesario. Es un límite tras el cual persiste una ciudad no vista, obturada por la imagen siempre presente y dominante de la iglesia. El relato muestra a los fieles de la Virgen de Luján brevemente, para demostrar ese todo visible y contrastarlo con lo que le interesa mostrar. Las historias de la casa de monstruos y del museo a partir de desechos, la de Fabián y la de Alejandro con Rosa están del otro lado, en ese espacio en el que obstinadamente, una aerosilla siempre vacía cruza, circula ajena a casi todo.

Ciclón fantasma (Argentina, 2024). Dirección: Diana Cardini. Guion: Diana Cardini, Lucas Distefano. Fotografía: Lucas Distefano. Edición: Diana Cardini, Mario Bocchicchio. Elenco: Fabián Orfano, María Rosa Mage, Reinaldo Alejandro Petralia, Marisa Pajaro, Facundo Orfano. Duración: 64 minutos.

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