La última película del director y crítico Dan Sallit, llegó a la sala virtual Puentes de Cine luego de un amplio recorrido por festivales, entre los que se destaca el Festival Internacional de Cine de Berlín y nuestro Festival de Cine de Mar del Plata donde se presentó en la sección Autores.
Fourteen refleja la relación de la extraña pareja que conforman Jo y Mara, dos amigas neoyorquinas que se presentan como opuestos complementarios. Mientras que Jo (Norma Kuhling) es despreocupada, impuntual e inconstante con el trabajo, el estudio y los vínculos interpersonales; Mara (Tallie Medel) es todo lo contrario, trabaja y estudia, es responsable y organizada con su propia vida, tanto que hasta se ocupa de ordenar la vida de su amiga. La película muestra un recorte de diez años en la historia de estas compañeras inseparables.
El relato está organizado en base a una serie de elipsis temporales, en una narración fragmentaria que va saltando de suceso en suceso, centrándose exclusivamente en los momentos de relación de las amigas. Cada vez que se retoma la historia no es posible precisar cuánto tiempo pasó, pero las alteraciones son obvias: novios que aparecen y desaparecen, trabajos que cambian, posiciones económicas que mejoran y empeoran, cambios de todo tipo. Todo lo que no vemos en imágenes es repuesto por los diálogos de los personajes; ellas son las que rellenan los espacios vacantes que fueron suprimidos en cada corte. En este punto resulta esencial la química que se manifiesta entre las dos actrices y el trabajo interpretativo de cada una. Luego de cada vacío el lazo sigue existiendo, pero la relación se torna cada vez más distante.
Dan Sallit construye varias de las escenas dejando al espectador por fuera de los asuntos, evitando mostrar el diálogo entre los personajes, o colocando la cámara demasiado lejos del objetivo, lo que impide descifrar gestos y posturas. De ese modo, lo mantiene como mero observador, como voyeur desde el margen, delegando en él la tarea de reponer o construir todo aquello que no es ofrecido.
La película podría resumirse como un constante ir de Mara hacia Jo. Casi todas las secuencias comienzan con un llamado de emergencia, un pedido de ayuda, o una necesidad inesperada. Siempre Jo demanda algo de Mara, pero nunca entrega nada. Justo en el medio de la película, Sallit coloca un extenso plano general en profundidad de campo, que nos permite una gran amplitud de visión y el registro del sonido del ambiente. Este plano rompe por completo con el ritmo que la narración tenía hasta el momento. Vemos una estación de trenes, observamos la llegada de una formación de la que desciende Mara, quien una vez más está yendo en dirección hacia Jo. Esta secuencia se constituye como una bisagra en la historia, ya que a partir de allí las cosas comienzan a cambiar para siempre. Este plano distintivo sugiere un antes y un después.
Fourteen reflexiona con profundidad sobre la amistad y sobre los desafíos de la vida adulta. Deja en claro que las vivencias de la adolescencia quedan lejos cuando llegan las responsabilidades y es uno mismo quien tiene que hacerse cargo de su propia vida. Refleja que no todos los seres tienen las mismas posibilidades para sobrellevar ciertos eventos y que los rastros del pasado suelen ser una dura carga. Aquí la amistad se presenta como refugio y lugar de rescate. Mara y Jo pueden atravesar temporadas de silencios, discusiones, angustias y separaciones pero la conexión entre ellas trasciende cualquier circunstancia. Aunque en apariencia la relación de amor se da en un único sentido (Mara hacia Jo), lo cierto es que las demostraciones de Jo hacia Mara son mucho más sutiles y tienen una resonancia mucho más profunda. Eso explica la devoción y admiración de Mara, que por momentos se torna incomprensible.
La aparición de la Fourteen de Dan Sallit es una verdadera suerte para las plataformas de streaming local, dado que se trata de una película pequeña e independiente muy bien realizada, de esas que son difíciles de encontrar. Es un film realista que expone los vínculos humanos de manera sensible y amarga. La sucesión de encuentros que enumera la narración componen la historia del desencuentro de estas amigas. Sin embargo, la separación física para esta amistad a prueba de todo, no significa la ruptura de un lazo sentimental que es inextinguible. Se comprueba que mientras todo cambia, el amor es la constante.
Calificación: 9/10
Fourteen (Estados Unidos, 2019). Dirección, guion y edición: Dan Sallitt. Producción: Caitlin Mae Burke. Coproducción: Graham Swon. Dirección de fotografía: Chris Messina. Elenco: Tallie Medel, Norma Kuhling, Evan Davis, Willy McGee, Scott Friend. Duración: 94 minutos. Disponible en la plataforma virtual Puentes de Cine.
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